¿Cómo preparar la piel para el bronceado perfecto?

A continuación, te compartimos los mejores consejos para cuidar tu piel antes, durante y después de la exposición solar.

1. Exfoliación, elimina impurezas y piel muerta: Antes de exponerte al sol, es clave eliminar las células muertas de la piel para conseguir un bronceado uniforme. Exfoliá tu piel con un producto suave al menos dos veces por semana, prestando especial atención a codos, rodillas y talones. Esto ayuda a que el bronceado dure más tiempo y luzca radiante.

2. Hidratación, el secreto de una piel sana: Una piel bien hidratada retiene mejor el color y evita la descamación. Aplicá diariamente cremas hidratantes ricas en aloe vera, manteca de karité o aceites naturales. Además, tomá al menos dos litros de agua al día para mantener la piel nutrida desde el interior.

3. Alimentación, potencia tu bronceado desde adentro: El consumo de alimentos ricos en betacarotenos, como zanahorias, calabazas, mangos y espinacas, estimula la producción de melanina, favoreciendo un bronceado más intenso y duradero. También es recomendable ingerir alimentos ricos en antioxidantes y vitamina C para proteger la piel del daño solar.

4. Protección solar, un paso imprescindible: No importa lo bien preparada esté tu piel, nunca debes exponerte al sol sin protección. Usa un protector solar con un FPS adecuado a tu tipo de piel y aplícalo al menos 30 minutos antes de la exposición. Reaplicá cada dos horas y después de nadar o sudar. Esto no solo evita quemaduras, sino que también te ayuda a conseguir un bronceado más saludable y uniforme.

5. Exposición gradual, evita daños en la piel: Para obtener un bronceado duradero y sin riesgos, evitá exponerte al sol por tiempos prolongados en los primeros días. Comenzá con sesiones cortas de 15 a 30 minutos y aumentá gradualmente el tiempo. Evitá las horas de mayor radiación (entre las 11 a.m. y las 4 p.m.) para reducir el riesgo de daño cutáneo.

6. Cuidado post-solar, prolonga tu bronceado: Después de la exposición al sol, hidratá tu piel con lociones after sun, preferiblemente con ingredientes calmantes como aloe vera o manzanilla. Evitá duchas con agua caliente, ya que pueden resecar la piel y acelerar la descamación.

Preparar tu piel correctamente antes de broncearte no solo te ayudará a conseguir un tono dorado y uniforme, sino que también la mantendrá saludable y protegida. Seguí estos consejos y disfrutá del sol de manera responsable. ¡Conseguí el bronceado perfecto sin descuidar tu piel!