Acción Terapéutica:

Antidiabético.

Indicaciones:

Indicado para el tratamiento de adultos con Diabetes Mellitus Tipo 2, especialmente en los siguientes casos:

• Como complemento a la dieta y el ejercicio cuando el control glucémico no es adecuado.
• En monoterapia, cuando el uso de metformina no es apropiado debido a intolerancia o contraindicación.
• En combinación con otros medicamentos para el manejo de la diabetes.

Posología:

• Dosis inicial: 0,25 mg (0,2 mL) de semaglutida, una vez a la semana, durante las primeras 4 semanas.
• Incremento de dosis:
  • Después de 4 semanas: aumentar a 0,5 mg (0,4 mL) una vez a la semana.
  • Tras al menos 4 semanas a 0,5 mg: incrementar a 1 mg (0,8 mL) una vez a la semana para un mejor control glucémico.
  • Después de al menos 4 semanas a 1 mg: aumentar a 2 mg (1,5 mL) una vez a la semana si se requiere mayor control glucémico.
• Notas importantes:
  • La dosis de 0,25 mg es solo inicial, no una dosis de mantenimiento.
  • No se recomiendan dosis superiores a 2 mg por semana.

Contraindicaciones:

• Hipersensibilidad al principio activo o a alguno de los excipientes.
• Uso en población pediátrica.
• Diabetes Mellitus Tipo 1.
• Insuficiencia cardíaca congestiva de clase IV.
• Embarazo y lactancia.
• Pancreatitis activa o antecedentes de pancreatitis.

Reacciones Adversas:

Posibles efectos secundarios:

• Trastornos del sistema inmunológico: Reacciones de hipersensibilidad.
• Trastornos del metabolismo y la nutrición: Pérdida de apetito, hipoglucemia.
• Trastornos del sistema nervioso: Mareos, cefalea.
• Trastornos oculares: Dificultades visuales relacionadas con cambios glucémicos.
• Trastornos cardíacos: Posibles alteraciones cardiovasculares (evaluar riesgo-beneficio).
• Trastornos gastrointestinales: Náuseas, vómitos, diarrea, dolor abdominal.

Precauciones y Advertencias:

• Interacciones con hierro: No administrar hierro por vía oral y parenteral de forma simultánea.
• Uso en condiciones específicas:
  • Precaución en pacientes con alcoholismo, hepatitis o insuficiencia hepática.
  • Evitar en casos de infecciones agudas o inflamaciones gastrointestinales, como enteritis, colitis ulcerosa o úlcera péptica activa.
• Supervisión médica: Monitorear de cerca a pacientes con riesgo de pancreatitis o problemas gastrointestinales.